El ambicioso Plan anunciado por la Presidenta de la Nación, no es algo menor, y su análisis debe hacerse desde un frente amplio. No son válidos aquí miradas desde intereses personales, y menos aún desde posturas ideológicas. Hay un mandato Constitucional que da derecho tanto a una vivienda digna como a una jubilación que le permita a nuestros abuelos que han hecho sus aportes durante más de 30 años a no tener que pasar penurias. Si bien este gobierno ha hecho mucho por aquellos (recordemos que este gobierno incorporó al sistema más de tres millones de jubilados, medida que representa una especial sensibilidad hacia el sector), todos sabemos que no es suficiente, la propia Presidenta es la primera que lo admite cuando dice que hay que profundizar el modelo.
Ahora bien, existe realmente la disyuntiva ¿Jubilación o viviendas? Voy a demostrar que esta alternativa es totalmente falsa. No existe tal disyuntiva. Creo que como he dicho anteriormente es necesario un análisis no solo profundo sino desde un frente amplio y teniendo en cuenta las relaciones circulares y las distintas potencialidades a desarrollar y las posibles consecuencias. En efecto, la fuente de ingresos con que cuentan los jubilados es el aporte que hacen los trabajadores, cuando mas ocupación más ingresos. Una recesión supondría una reducción inmediata en los ingresos con los efectos que no es difícil prever.
La construcción es la industria que mas trabajo requiere, es necesario incorporar la actividad de 47 industrias subsidiarias para poder construir una vivienda; desde cementeras hasta acerías, y desde operarios hasta profesionales, pasando por industrias cerámicas, electrodomésticos, industrias de insumos eléctricos, gas, sanitarios. Al mismo tiempo parte del préstamo retorna por pagos de tasa impuestos y contribuciones, en especial el pago de derechos de construcción. A ello hay que agregar el aporte que cada empresario y cada trabajador hace en forma directa al ANSES a través de la AFIP. Es decir, el ANSES no solo recibirá los intereses por la el dinero prestado, intereses que si bien son bajos con relación a las tasas activas, no lo son respecto a las tasas pasivas, que es la única que capitaliza el ANSES, a través de inversiones en bonos, plazos fijos, etc.
No escapara a cualquier analista serio que el mundo está transitando por una crisis de largo aliento. Si bien hasta el momento nos ha afectado poco con relación a su magnitud, ello no es óbice para que con el correr de la crisis sus efectos se profundicen. Vivimos en un mundo Globalizado, dependemos del bienestar del resto de los países del mundo, y principalmente de nuestro principal socio Brasil. Una manifestación más profunda de la crisis redundaría en forma inmediata en una reducción de la oferta de empleo con todas sus consecuencias.
El gobierno está intentado que la crisis internacional no nos afecte profundamente. Para ello está implementando para muchos, inadecuadas medidas, pero nadie puede decir que el la Presidenta se queda con las manos cruzadas esperando la tormenta, antes bien está intentado por todos los medios que la crisis no se transforme en un tsunami. La medida anunciada es por sobre todo un fuertísimo incentivo para evitar la desocupación y al mismo tiempo solucionar un problema que viene postergándose desde la década del 50, oportunidad en que se dejo de desarrollar un plan de viviendas incentivo que quedo truncado con el derrocamiento del Presidente Perón.
Todo economista sabe que el sistema capitalista se mueve por ciclos y anticiclos, y que no existe el crecimiento infinito, y que a un período de bonanza sobreviene necesariamente un período de crisis. Enseña Keynes que en períodos de crisis es vital la intervención estatal para contrarrestar sus efectos, su teoría quedo resumida en la metáfora “Presidente haga pozos para después taparlos” Así EEUU salió rápidamente de la crisis y tuvo un crecimiento sostenido que lo encontró al comienzo de la primera guerra mundial en una posición de privilegio.
Esa metáfora hacer pozos, implica aquí y ahora construir viviendas, cumplir un mandato constitucional tantas veces postergado, pero no solo ello, también implica dar trabajo, aumentar la recaudación del ANDES, y movilizar a 47 industrias relacionadas. Los jubilados no deben temer nada, antes bien deben estar contentos de saber que sus ingresos que dependen fundamentalmente de la recaudación previsional estarán asegurados!
Ahora Bien, creo que ésta es una excelente oportunidad para exigir que las construcciones tenga un sesgo de sustentabilidad, de modo que las 400.000 viviendas reduzcan tanto su consumo energético, como la contaminación ambiental, ello no solo mejorará el medio ambiente sino reducirá su costo de mantenimiento. Para ello se deberá exigir a los tomadores de crédito cumplir con ciertas normas elementales tales como asegurar la aislación térmica a ciertos niveles sostenibles, exigir el suministro de agua caliente a través de energía renovable, elección de pinturas acorde con la sustentabilidad. Ello asimismo no solo favorecerá la creación de nuevas industrias, sino también la investigación en una disciplina actualmente no muy desarrollada.
Arquitecto-Abogado-Procurador
Investigador Independiente
Posgrado en Derecho Urbanístico Español
Posgrado en Energías Renovables
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